Un cuento sin nombre

"Él pensaba, que en todo el universo, en cada realidad, justo como las puertas que había encontrado, se encontraban mensajes ocultos, dispuestos de tal forma que sólo ciertas personas con la inteligencia, la percepción, la astucia, la magia, la intuición y el deseo suficientes, pudieran encontrarlos." "Aún así, el joven Kalpax aún viene de vez en cuando a visitar su torre y a recordar los viejos tiempos. Y de vez en cuando una persona llega a éste lugar y logra encontrar el mensaje oculto que yace aquí. Y cuando esto sucede, el joven hechicero redacta su historia en un libro y lo deposita en éste cuarto, junto con todos los demás volúmenes de su colección. Aquellos libros que esperan a que algún alma con naturaleza inquisitiva que tenga el deseo necesario para buscar, los encuentre y pueda leerlos y más que nada, comprender las historias que se relatan en ellos."