MACHO, MACHOTE

Este libro muestra una galería de malos hombres usando una denominación que todos entendemos: algunos representan la versión más detestable de lo masculino (asesinos, locos, agresores sexuales, etc.), mientras que otros son desafortunados, malogrados de la vida. Unos y otros representan ese lado oscuro que tratamos de arrumbar de nuestro día a día, de nuestra conciencia del mundo, sus habitantes y circunstancias, aunque están ahí, al acecho o degenerándose en el curso lamentable de sus existencias… También aparecen algunos ejemplos de esa clase pasiva, machos de chicha y nabo, calamandurrios de apariencia buena, que perpetúan el mal del mundo con su no acción, quienes nunca se meten y permanentemente consienten. Son casi peores que los otros. Hay demasiados y se les considera políticamente correctos y, ante todo, buenos ciudadanos, es decir, sumisos. De todo hay en la viña del Señor, siempre más malo que bueno.